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Glomerulonefritis Posestreptocócica

La glomerulonefritis es la inflamación de los glomérulos, los cuales son pequeños vasos sanguíneos ubicados en los riñones encargados de filtrar los desechos, sales y el exceso de líquido de la sangre.

La glomerunefritis posestreptocócica hace referencia a la aparición de este padecimiento después de haber tenido una infección con estreptococos.

Esta afección tiene mayor prevalencia entre los niños y jóvenes de entre 4 a 14 años.

Una vez que una persona ha tenido infecciones provocadas por la bacteria estreptococo tipo A que suelen incluir las infecciones de la piel y la garganta, puede padecer de los resultados de la lucha del sistema inmune contra el agente patógeno. Este resultado afecta a los riñones y su funcionamiento.

Lo anterior quiere decir que esta enfermedad se debe a una respuesta inmune incorrecta del organismo, por lo cual, no representa ningún riesgo de contagio para otra persona.

La glomerunefritis posestreptocócica suele manifestarse casi 2 semanas después de haber contraído una infección de garganta o de piel por estreptococo grupo A.

Síntomas de glomerunefritis posestreptocócica

Al generar problemas con la función normal de los riñones, se presentan los siguientes síntomas:

• Ganas frecuentes de orinar.
• Menos producción de orina.
• }Fatiga.
• Orina de color café o rosa.
• Hinchazón de pies, manos, cara, debido a la acumulación de líquidos.

Además, se puede presentar:

• Niveles alto de proteína en la orina.
• Niveles bajos de proteína en la sangre, lo cual puede provocar anemia.
• Hipertensión o presión arterial alta.

Si esta afección no puede tratarse, puede producir, a largo plazo, insuficiencia renal, haciendo que sea necesaria la diálisis o trasplante de riñón.

Tratamiento

El tratamiento de esta enfermedad se centra en el control de los síntomas, por lo cual, se usarán medicamentos antihipertensivos, antinflamatorios y diuréticos para controla la tensión arterial, inflamación e hinchazón.

Asimismo, se deberá cuidar la alimentación y los hábitos para poder proteger al riñón sensible.

Existe la posibilidad del uso de antibióticos para eliminar residuos de la bacteria estreptocócica.

Para la mayoría de los casos, la glomerunefritis posestreptocócica desaparece por sí sola después de algunas semanas.